La Asociación de Vecinos del barrio del Arrabal de Teruel ha recibido un fuerte espaldarazo en la renovación de su junta directiva al lograr la incorporación de ocho miembros que  junto a los tres que se habían quedado de la ejecutiva saliente, aseguran así la continuidad de la misma, en riesgo de desaparecer.

La nueva junta, constituida hace quince días, se ha podido formar tras el acuciante llamamiento a la implicación asociativa por parte de las tres personas que se quedaron en la citada asociación. La falta de implicación en los órganos vecinales registrada en el último año había  impedido la realización de actividades tradicionales, como la semana cultural, así como tomar iniciativas de interés para el barrio, uno de los más activos de la capital en los años noventa del siglo pasado. Pero, además, el barrio estaba expuesto a la desaparición de su asociación, ya que son necesarios nueve miembros como mínimo para su funcionamiento.

Desde la nueva Junta señalan que la mejora de las infraestructuras, como aceras y adecentamiento de edificaciones en ruina, así como la remodelación del centro social, son algunos de los objetivos que se van a plantear para los próximos años. Lo más inmediato, sin embargo, es la organización de la comisión de las fiestas del barrio para el 19 de mayo, en donde se pretende incluir actividades culturales que no pudieron celebrarse por la supresión de la semana cultural así como recuperar antiguas tradiciones del barrio.

La nueva Junta está integrada por Alberto Meléndez, Luis Cortada  y Ainoa Sánchez, Elísabet Ramos como presidente, vicepresidente, secretaria y tesorera, respectivamente. Como vocales figuran Mª Dolores Palomo, Mª Luz Cortés, Juanjo Cortés, José Luis Sánchez, Raquel Domingo, Mª Jesús Antón y Vanesa Garcés.